
Domingo, 13 de Diciembre de 2020 Reflexión
Reflexion
Hoy contemplamos en el evangelio al padre que tiene dos hijos y dice al primero: Hijo, vete hoy a trabajar en la viña (Mt 21,28). Éste respondió: ‘No quiero’, pero después se arrepintió y fue (Mt 21,29). Al segundo le dijo lo mismo. Él le respondió: Voy, señor; pero no fue... (Mt 21,30). Lo importante no es decir “sÃâ€, sino “obrarâ€. Hay un adagio que afirma que "obras son amores y no buenas razones".
En otro momento, Jesús dará la doctrina que enseña esta parábola: No todo el que me diga: ‘Señor, Señor’, entrará en el Reino de los Cielos, sino el que haga la voluntad de mi Padre celestial
(Mt 7,21). Como escribió san AgustÃn, existen dos voluntades. Tu voluntad debe ser corregida para identificarse con la voluntad de Dios; y no la de Dios torcida para acomodarse a la tuya. (BJV)