
Jueves, 29 de Octubre de 2020 Reflexión
Reflexion
Hoy, ¿Pueden fijarse en el inicio de este Evangelio? Como Ellos, los fariseos, le estaban observando. Y Jesús también observa: Notando cómo los invitados elegÃan los primeros puestos (Lc 14,7). ¡Qué manera tan diferente de observar!
La observación, como todas las acciones internas y externas, es muy diferente según la motivación que la provoca, según los móviles internos, según lo que hay en el corazón del observador. Los fariseos como nos dice el Evangelio en diversos pasajes observan a Jesús para acusarlo. Y Jesús observa para ayudar, para servir, para hacer el bien. Y, como una madre solÃcita, aconseja: Cuando seas convidado por alguien a una boda, no te pongas en el primer puesto (Lc 14,8). Jesús dice con palabras lo que Él es y lo que lleva en su corazón: no busca ser honrado, sino honrar; no piensa en su honor, sino en el honor del Padre. No piensa en Él sino en los demás. Toda la vida de Jesús es una revelación de quién es Dios: “Dios es amorâ€. (BJV)