Por Alberto Linero

 

 

Señor mío y Dios mío, yo creo en tu Palabra, y, como el Centurión, digo que solo una palabra tuya bastará para sanarme.

 

Y por eso, al reflexionar en tus palabras de bendición, quiero que cada palabra que salga de mi boca sea para edificar y no para destruir a los demás.

 

Quiero tener siempre las palabras más adecuadas, las que puedan tener un propósito de bendición para los otros.

 

No quiero estar metido en chismes ni discusiones que no me hacen bien, al contrario, lo que hacen es dañarme completamente.

 

Te entrego mi corazón, toda mi vida, todos mis sueños y te pido que me sigas haciendo un instrumento de bendición para aquellos que amo y con los que comparto. Mi corazón te reconoce como el único rey de mi vida, como el Todopoderoso, como la Palabra que da vida.

  

Gloria al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo.  Como era en el principio, ahora y siempre por los siglos de los siglos. Amén… 

 

¡En la Voluntad de Dios siempre!  

 

¡JESÚS TOMA MI VOLUNTAD, Y DAME LA TUYA!  

                         Itinerario de Evangelización 2022

TEMA DEL AÑO: “Un pueblo que testimonia a Jesucristo con sus carismas y ministerio, que con María ilumina su cultura con el Evangelio

LEMA DEL AÑO: Con Jesucristo, por María, evangelicemos la cultura

FEBRERO:

Lema: Yo los haré mi pueblo y seré su Dios” (Ex 6, 7)

Valor:  IDENTIDAD

Liturgia del Domingo

Lecturas    Moniciones      Homilía

Feria de la Semana

Lecturas     Moniciones     Homilía

                                 Escuche Aire 96.1. La voz a los 4 vientos y a los 4 caminos

                                                    El día 2 de marzo, empieza la Cuaresma