Mi Dios, mi refugio en tiempos de angustia. Tu presencia y escuchar Tu voz son imprescindibles para mí en nuestra cita de todas las noches, cuando todo mi ser te busca con insistencia.

Que pueda llegar hasta Ti y permanecer en Tu Espíritu para poder tener la confianza y perseverancia en Tu amor para serte fiel y lleno de esperanza poder trabajar en lo que Tú me señales que es Tu voluntad.

Cuento con tu mano cariñosa que me sostiene en mi diario quehacer y así llegar al final de este camino que me has trazado.

Todo es posible para quienes confiamos profundamente en ti y en Tu gracia. Repito el himno: “Tu eres Señor del universo, en Tu mano está el poder y la fuerza, que me conforta”.

Te abro mi corazón y te entrego en este momento todos mis anhelos, mis temores, mis alegrías y te doy gracias infinitas porque Tu amor y Tu providencia siempre están conmigo.

Guárdame bajo Tu Manto porque es el único lugar donde me siento seguro.

Gloria al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo.  Como era en el principio, ahora y siempre por los siglos de los siglos. Amén…

¡En la Voluntad de Dios siempre! 

¡JESÚS TOMA MI VOLUNTAD, Y DAME LA TUYA! ✌